Alrededor de cien vecinos del barrio “La Cañada” se agruparon en la esquina de Avenida Calchaquí y República del Líbano, donde encendieron cubiertas de automóviles y ramas secas para cortar la circulación del transito en reclamo por las inundaciones que afectan las calles donde se encuentran domiciliados.
A fines del 2008, en una reunión en el Municipio quilmeño con los miembros de la agrupación vecinal “1º de Abril”, las autoridades municipales se comprometieron a “comenzar en marzo las obras en las cloacas de La Cañada”. En esa oportunidad, el Secretario de Recursos Hídricos, Manuel Carraselas, explicó cómo se desarrollaría la obra, la cual ya estaba en planes, “lista para la licitación”, así como así también se ufanó de la labor en el Arroyo las Piedras, y prometió mejoras en los desagotes de las diferentes calles que han acumulando agua y barro en las esquinas (por ejemplo: 390, esquina San Juan, y 390, esquina de Líbano). Asimismo prometió que rápidamente se comenzarían las obras de cloacas para “toda la Cañada” -trabajo en conjunto con AySA- y que el Municipio estaría gestionando la escrituración de vecinos del barrio “La Primavera”, que en breve recibirían el número de expediente provincial.
Marzo llegó a su fin y ningún empleado municipal pisó el barrio de “La Cañada”. A fines de abril, una serie de lluvias inundó este humilde barrio de Quilmes Oeste. Fastidiados, los vecinos domiciliados en la calle 390 –principal zona afectada por el agua- junto con miembros de la agrupación “1º de Abril”, volvieron a reunirse con el Intendente Francisco Gutiérrez, que se señaló “muy conocedor del tema” y prometió “una pronta solución”. La indignación de los vecinos llegó a su auge cuando Gutiérrez reveló su desconocimiento sobre el tema al publicar en el folleto municipal “La Hoja” del mes de Junio: “el Municipio de Quilmes firmó una serie de acuerdos con AySA, en el marco del Programa Agua + Trabajo (…) el primer módulo se llevará a cabo en “La Cañada” a través de la Cooperativa 26 de Julio de Ezpeleta Oeste. El segundo módulo también se realizará en el barrio de “La Cañada”, a través de la Cooperativa Organización Quilmeña: se colocarán 8.000 metros de cañería que abarcarán el perímetro comprendido entre la calle 391, el Arroyo Las Piedras, Rodolfo López y Zapiola.”
En el marco de las zonas afectadas por la inundación no se contempla ninguna calle del perímetro cercado por el Intendente en el folleto. Los vecinos de la calle 390, que llevaban semanas con el agua sentada frente sus viviendas, se enfurecieron con la publicación de Gutiérrez, tomando como medida inmediata en una asamblea con la agrupación “1º de Abril” el corte de la Avenida Calchaquí y Avenida Líbano.
Los cortes empezaron hace quince días y se prolongarían semanalmente hasta que el gobierno local ofrezca una solución para los más afectados por el agua, los vecinos de la calle 390. Por otra parte también se reclama que el Jefe comunal ofrezca una disculpa a la comisión que se reunió con él en mayo, a la que el Intendente aseguró “estar muy interiorizado en el tema de las calles de ‘La Cañada’ afectadas por las inundaciones de las cloacas”, demostrando en el folleto “La Hoja” todo lo contrario.
